Los Detalles Importan: Por Qué Nada Está Puesto Porque Sí

En Abarike, cada elemento que ves (y los que no ves) ha sido elegido con intención. Porque creemos que la diferencia entre lo bueno y lo memorable está en los detalles.

1. Una sal no es solo sal

Usamos escamas de sal del Cantábrico infusionadas con algas, cítricos o humo según el plato. No solo por sabor, también por mensaje.

2. El pan cuenta la historia del lugar

No es pan de paso. Es masa madre, de obrador local, con cereales asturianos. Lo tratamos como un pase más del menú.

3. Vajilla con alma

Cada pieza de cerámica está elegida (o diseñada) para acompañar lo que contiene. Que el plato y la pieza dialoguen, no compitan.

4. Decorar no es adornar

No usamos brotes por costumbre ni flores comestibles porque sí. Si están, tienen función: dar frescor, matizar una grasa, aportar aroma.

5. El trato también es parte del plato

La forma en la que te servimos, te explicamos, te escuchamos… también es cocina. Porque lo que rodea al plato lo cambia todo.

Por eso en Abarike no hay nada al azar. Ni una pizca. Ni un gesto. Porque los detalles, cuando son de verdad, no se notan. Se sienten.